El proceso judicial llegó a su conclusión el pasado miércoles en la Cámara Cuarta del Crimen de Córdoba, cuando finalmente se dictó una condena de 16 años de prisión para un hombre declarado culpable de abuso sexual y violación en el contexto de violencia intrafamiliar. El caso, que involucra a una víctima que tenía tan solo 16 años cuando logró escapar del hogar donde sufrió los abusos de su propio padre, ha conmovido a la comunidad y resalta la importancia de la lucha contra la violencia de género.
La víctima escapó de su casa dejando una carta falsamente alegando un embarazo para volver con su madre. Pasaron siete meses angustiantes antes de que M. lograra reunir la fortaleza para relatar el abuso que había sufrido. El caso llegó a la Justicia de Córdoba a finales de 2020, y finalmente, después de un prolongado proceso legal, se dictó la sentencia el miércoles pasado.
El violador fue declarado culpable de abuso sexual simple triplemente calificado, considerando el vínculo familiar, la convivencia preexistente y el grave daño a la salud mental de la víctima. Además, se le imputaron cargos por abuso sexual con acceso carnal triplemente calificado. El juez Enrique Berger, a cargo del caso, ordenó que se investiguen posibles delitos de amenazas calificadas y privación ilegítima de la libertad, en base al testimonio de la víctima.
Según los relatos de la joven, los abusos comenzaron cuando tenía 14 años y continuaron hasta sus 16 años. La joven, junto con un hermano, había decidido mudarse con la familia de su padre, pero pronto su vida se convirtió en un infierno de abusos y amenazas. Logró escapar de esa pesadilla en abril de 2020, en medio de las restricciones más estrictas de la pandemia de coronavirus.
A pesar de la distancia física, el agresor continuó acosando y amenazando a su hija. En noviembre del mismo año, M. confió en un familiar y compartió su terrible experiencia, lo que finalmente la llevó a denunciar en el Polo de la Mujer. La investigación enfrentó dificultades, pero la valiente joven persistió en su búsqueda de justicia. En marzo de 2021, cuando la investigación parecía no avanzar, la víctima intentó quitarse la vida, pero afortunadamente, su madre logró salvarla a tiempo.