Al caer la noche del domingo, la policía de Unquillo recibió el llamado de emergencia de una joven madre que desesperada solicitó la ayuda de los uniformados ya que su bebé de un mes se estaba ahogando.
Inmediatamente, se hicieron presente en el lugar solicitado el Cabo Martín Palacio y la Agente Celeste Salomón, logrando constatar que el pequeño se encontraba sin poder respirar y se estaba poniendo morado. Presurosa, la agente Celeste Salomón comenzó a realizarle la maniobra de Heimlich, en la parte trasera del móvil, mientras se trasladaban al hospital pudiendo lograr el desahogo del bebé en el camino y salvando su vida.
El pequeño, de nombre Santiago, quedó internado para una mejor valoración en el hospital de la ciudad.