Mateos tiene 5 añitos y vive en el barrio José Hernández de la ciudad de Dean Funes. Durante la tarde de hoy, vivió momentos de angustia y desesperación cuando su mejor amigo «Carlos Bartolo», desapareció de su casa y tardó más de lo pensado en aparecer. Pero el acontecimiento tiene, afortunadamente, un final feliz.
Durante esta tarde de miércoles, su mamá Guada posteó en grupos de Facebook de la ciudad que Carlos Bartolo, el gallito de Mateo, había desaparecido: «Por favor si alguien lo levantó o se lo llevó sin saber que tenia dueño, que me lo devuelvan, es de mi hijo y está llorando. Llegamos a casa y no está su mejor amigo, por favor. Carlos es el mejor compañero de mi hijo» rogaba Guada.
Rápidamente, los vecinos de la ciudad comenzaron a compartir la publicación y mirar para todos lados en la calle Huber Elfen a ver si «Carlos Bartolo» aparecía sano y salvo. ¡Y así fue! Horas más tarde, Mateos y su amiguito se reencontraron, es que el gallito, andaba paseando por el barrio… ¡Y no avisó!
Tras la viralización de la búsqueda, desde nuestra redacción nos surgió la curiosidad de saber cómo comenzó la historia de amistad de nuestros simpáticos protagonistas y hablamos con su mamá, Guada Diaz, quien nos relató con detalles esta dulce historia.
Mateos y Carlos Bartolo se conocieron el año pasado, más precisamente en el mes de agosto, ya que mamá, se lo regaló para el día del niño. «Carlos es el mejor amigo de Mateos desde el año pasado, que se lo regalé para el día del niño», dice mamá, y agrega divertida «mi regalo fue la bici, pero la verdad no le dio mucha bola, se quedó mil veces con Carlos…. que si hubiera sabido le regalaba más gallos».
Era la primera vez que Mateos adoptaba un gallito, y su pareja, porque también está «Carla», una pinina. Siempre había tenido perritos de mascota. Guada cuenta que la relación de su hijo con la pinina no es la mejor, tal vez ella esté un poco celosa, porque, es con Carlos Bartolo con quien sí pegó toda la onda y se volvieron inseparables: van a hacer las compras juntos, duermen juntos, andan en bicicleta los dos, pasean por el barrio ¡y hasta lo espera a Mateito para merendar!
Hoy, cuando Carlos Bartolo desapareció, el llanto se apoderó de Mateos, ¡Su mejor amigo en la vida había desaparecido! Pero finalmente, no estaba muy lejos, y volvió a casa para seguir acompañando a todos lados a su amiguito Mateos y continuar llenando de alegría sus días.
Juntos, se han vuelto la dupla más dulce del barrio y su estrecha amistad y compañerismo, los ha vuelto un ejemplo de que el amor, que mejor dicho, nos da «alas» para hacernos mejores amigos de quien nos haga felices, hasta de nuestras mascotas si queremos. Como Mateo y Carlos Bartolo, que hoy, son inseparables.