En horas de la noche, tras una llamada al 911, la patrulla motorizada de la policía se constituyó en en barrio Centro, donde un vecino mayor de edad manifestó que un perro de raza pitbull sin medida de sujeción ni dueño, atacó a otro can de raza Weimaraner produciendo una fractura en la pata delantera derecha.
Se procedió al secuestro del animal que fue llevado hasta al depósito judicial y se encuentra un lugar apropiado para el cuidado del mismo.
La policía se acoge en el artículo 89 del Código de Convivencia Ciudadana por tenencia o circulación de animales potencialmente peligrosos.