El nacimiento se produjo en horas del mediodía, en el Hospital Zonal de Añatuya. El nene nació con dos cabezas, y lamentablemente falleció a los pocos minutos de su nacimiento.

El bebé falleció poco después y generó estupor entre el personal médico y familiares de la parturienta, de 22 años y oriunda de la localidad de Real Sayana.

Debido a la particular anomalía, los esfuerzos médicos por salvar la vida del recién nacido resultaron infructuosos y la criatura dejó de existir minutos antes del mediodía.

Según se informó el caso se trató de un vestigio de siameses. La criatura presentaba un tórax, dos troncos además de las dos cabezas.