Los afiliados a prepagas en Argentina enfrentan una situación crítica, con un aumento sin precedentes en las cuotas que dificulta aún más el acceso a la atención especializada. Muchos pacientes se ven sorprendidos al ser cobrados con “copagos” adicionales, en su mayoría en efectivo y sin registro.
Este escenario se ha desencadenado por la insatisfacción de los médicos respecto a la remuneración que reciben de las empresas de medicina privada por sus consultas, lo que los lleva a trasladar esta carga económica a los pacientes.
En lo que va del año, las cuotas de las prepagas han experimentado un incremento superior al 70%, prácticamente a la par de la inflación, lo cual representa un desafío económico creciente para los usuarios.
Esta problemática comenzó a manifestarse a mediados del año 2022, coincidiendo con un fuerte repunte inflacionario, y se ha agudizado este año a raíz de las quejas de los profesionales de la salud.
Según testimonios recabados por Noticias Argentinas de pacientes y médicos, las quejas no se limitan al aumento de las cuotas, sino que ahora también se suman los inesperados “copagos” que oscilan entre mil y cinco mil pesos. Esta situación genera una preocupación adicional para los usuarios, quienes se encuentran con dificultades para afrontar estos costos imprevistos.
La clase media argentina, afectada por la inflación, enfrenta cada vez más obstáculos para mantener los servicios de medicina privada. Por primera vez desde el año 2001, se registran más bajas que altas en la afiliación a prepagas. Esto pone de manifiesto la difícil situación de los sectores medios, donde un 30% de sus miembros se encuentra al borde de caer en la pobreza según estadísticas oficiales.
Ante las falencias y necesidades del sistema de salud público, los sectores medios recurrieron a las prepagas en busca de una alternativa. Sin embargo, en los últimos años, el costo de estos servicios se ha vuelto prohibitivo debido a la inflación.
Además de los problemas con los “copagos”, la disponibilidad de turnos médicos cercanos es escasa, ya que los profesionales imponen un límite en la atención a afiliados de prepagas.
En dos de las principales coberturas del país, los asistentes advierten que las consultas no serán atendidas rápidamente. Es común escuchar que para especialidades como salud mental, dermatología, oftalmología, odontología y pediatría, los turnos disponibles se encuentran para diciembre o incluso más allá.
La falta de disponibilidad de turnos con especialistas en prepagas ha llevado a que 3 de cada 10 afiliados recurran a hospitales públicos, donde en algunos casos deben esperar en largas colas desde las 5 de la mañana para ser atendidos.
La Unión Argentina de Salud (UAS), que agrupa a la mayoría de las organizaciones de medicina privada, reconoce la crisis de especialistas que abandonan la cartilla, atribuyéndola a la insuficiente financiación del sistema.
Esta situación ha llevado a que un 10% de los afiliados opte por planes de salud más económicos y un 7% cambie a una prepaga más asequible. Además, un 34% de los pacientes que acuden a hospitales tienen una obra social o prepaga, mientras que un 26% se atiende gratuitamente en hospitales públicos.
Los médicos explican que la situación se debe a las escasas remuneraciones que reciben de las prepagas y a los retrasos en los pagos, lo que representa un golpe financiero en tiempos de inflación. El cobro de copagos se ha convertido en una forma de protesta silenciosa por parte de los profesionales de la salud.
La Confederación Médica de la República Argentina (COMRA) afirma que los especialistas están agotados y no pueden continuar en estas condiciones. La raíz del problema radica en el desfinanciamiento del sistema de salud y la falta de actualización de los honorarios por parte de las prepagas.
Esta situación no solo afecta a los médicos, sino que pone en una situación de vulnerabilidad económica a los pacientes, quienes se ven obligados a asumir costos adicionales para recibir atención médica. La salud de la población se ve comprometida en medio de esta crisis del sistema de medicina prepaga en Argentina.