En Estados Unidos, los padres adoptivos no querían que su hijo fuera alcohólico como su padre biológico. Por eso, le dieron un cóctel de cerveza, tequila y whisky, para que sintiera los efectos negativos de la bebida. Pero al día siguiente el hombre encontró al pibe de 16 años inconsciente, rodeado de vómito y sin pulso.

La revista estadounidense People publicó que la pareja de Woming no quería que el joven de 16 años se convirtiera en alcohólico, como es el caso de su padre biológico.

Entonces, decidió darle a probar una gran dosis de alcohol para que conociera los efectos negativos de la bebida, una idea que fue puesta en práctica con un resultado trágico.

Kendall tomó tequila, cerveza y whisky y luego se fue a dormir. Al otro día el papá adoptivo del chico lo encontró en su habitación inconsciente, rodeado de vómito y sin pulso.

La autopsia determinó que la muerte fue provocada por las “complicaciones derivadas de la intoxicación aguda por alcohol”.