Hay dudas en torno a las circunstancias en las que un cazador fue asesinado al ser confundido con un jabalí, por otro grupo de hombres, en la localidad cordobesa de Anisacate.

El episodio se registró en la noche del pasado 26 de agosto en un sector denominado Los Talas, de la mencionada comuna, y tuvo como víctima a Pablo “Paco” García, de 36 años, quien se desempeñaba como comerciante en Alta Gracia.

Para la familia de la víctima, la escena del sangriento hecho, despierta sospechas sobre el móvil del hecho, ya que -según señala Néstor, hermano de “Paco”- el lugar fue armado.

Néstor García fue quien encontró el cadáver 20 horas posteriores al hecho. Aseguró que la víctima estaba correctamente sentada en la reposera, que utilizaba para esperar a los chanchos del monte, y que tenía sobre su falda, la escopeta tomada como si su mano hábil fuera la izquierda.

Además, según consta la investigación, que lleva adelante el fiscal Emilio Drazile, el grupo de supuestos autores del hecho, luego del disparo mortal, abandonaron sigilosamente la zona y escondieron el arma homicida en un paraje, cercano a Los Reartes.

Las pericias demostraron que el disparo fatal fue realizado a menos de 20 metros, algo que dista de la declaración de los acusados.

Si bien la familia no tiene indicios de cuál podría haber sido el móvil del crimen, no tiene dudas que fue premeditado. Sostienen que “Paco” pudo haber mantenido una discusión previa con los cazadores furtivos, que desencadenó en la tragedia.

El autor del asesinato fue identificado e imputado de homicidio culposo agravado por uso de arma de fuego, aunque no detenido.